Nadando por el Autismo es un proyecto que nuestro amigo Emilio Merino Toro puso en marcha el año pasado, con el que se propuso como reto solidario cruzar a nado el estrecho de Gibraltar. Todos los fondos recaudados con este desafío se destinarán a la adecuación de una sala multisensorial en la sede de APNABA de Badajoz.
APNABA es una asociación sin ánimo de lucro que se fundó en 1990 a consecuencia de la inquietud de varias familias de personas con trastornos del espectro de autismo (TEA) que buscaban una manera de dar respuesta a las necesidades específicas de sus hijos, y que actualmente atiende a más de 300 usuarios. Con el nombre de TEA se incluyen un conjunto de síntomas que suponen una desviación en el curso típico del desarrollo, que aparece antes de los tres años de edad, y se manifiesta con una marcada alteración en la forma de relacionarse con otras personas (contacto ocular, expresión facial, interés en compartir, reciprocidad emocional…) en la manera de comunicarse (falta de respuesta al lenguaje, retraso en su desarrollo, uso no comunicativo…) y el modo de comportarse (movimientos repetitivos, rituales, dificultades con los cambios).
El pasado 9 de agosto Emilio consiguió su reto y cruzó el estrecho de Gibraltar en 4h y 43 minutos realizando una travesía de 15.800 m. Por cada metro recorrido, Arcosurex ha donado 1,00 céntimo al proyecto nadando por el autismo. Con esta entrega ponemos nuestro granito de arena porque como dijo Albert Pike: “Lo que hacemos por nosotros mismos muere con nosotros, lo que hacemos por los demás permanece y es eterno”.